Un grito ahogado. Un llanto frustrado. Un agridulce veneno. Un confuso sentimiento. Un masoquismo hacia ti. Una ausencia prolongada. Un invierno interminable. Un otoño sin Lluvias. Una palabra manipuladora. Un cálido atardecer. Un gélido alba. Una dulzura inigualable. Una diversión sádica. Una sonrisa encantadora. Una espesa Lágrima. Mi pulso latente. La llamarada inminente. El alma errática.
Y heme aquí escrbiendote otra carta, otra más, si. De las 1001 que te he escrito, de la colección de cartas que nunca verás, nunca leerás.
Soy una incoherente, pero me fascina hacerte escritos; Pues así, puedo desquitar mi frustración de haberte perdido: '1001 veces'.
Y asi la ausencia mata, los sauces decaen.
ResponderEliminar