Broken Clock.

Mientras el reloj marcaba las 2:50 el sol anunciaba las 8:30
¿Está esta cosa loca acaso?-Se preguntó.

El pequeño reloj que avanzaba más rápido cada segundo ya no funcionaba o más bien era él que ya no funcionaba y si era así ¿Por qué se precipitaba a dar una explicación a lo que no la tenía? quería explicar por qué envejeció, ¿Acaso eso es posible? tuvo miedo por un instante pero fue efímero lo fué tanto que casi no lo sintió entonces ¿Qué había sido? y ¿Por qué había sido así? muchas preguntas invadieron su mente y no había respuesta alguna, sollozó, dió un grito de desesperación volvió el miedo, pasaron recuerdos entonces otra pregunta llegó ¿Moriré? No, no lo haré, No quiero morir ¿Es la vida tan corta? ¿Por qué lo es? vinieron a el recuerdos y se pregunto algo más ¿Por qué los momentos de felicidad son tan efímeros pero tan preciosos y por qué los momentos de triztesa son largos y desesperantes? Si-dijo para si mismo, pero para aquello si tenía una respuesta, aunque lo que si tenía era una gran felicidad por ello y se dijo:

-No es cierto los momentos de felicidad no son efímeros, solo que los opacamos inconcientemente y la triztesa nos gana.
¿Por qué es así? No lo sé pero lo descubriré en algún momento y cuando lo haga podré morir feliz.

Siempre y cuando desee estar feliz lo haré y no me cansaré de hacerlo, la triztesa es invevitable, pero sí puedo opacarla con mi felicidad.

Y Siendo así el reloj se rompió y sus manijas rotas salieron volando en pedazos, entonces, el sintió cómo si otra mañana hubiera empezado ¿Por qué era así? ¿Por qué todo es tan extraño pero ya es normal? ¿Es esto acaso algún tipo de realidad? ¿Acaso había descubierto la verdad? Sonrío por primera vez rio y cayó en un profundo sueño del cuál jamás despertó.